Todos los teQuieRo* que dijistes fueron en bano. Los soltastes como cualquier otra palabra, sin saber ni si quiera lo que collevaba decirla.
 ¡Silencio! Para decir mentiras mejor quedate callado, no quiero volver a oir otro te quiero falso de tus labios.
 ¡Silencio! Para decir mentiras mejor quedate callado, no quiero volver a oir otro te quiero falso de tus labios.
 

 

No hay comentarios:
Publicar un comentario