

*.:Debo cumplir mi promesa:.*
Buscar otra manera de desaogarme, que no implique hacerme daño.
Que si el pelo, que si la cara, que si los estudios, que si mi peso, que si mis miedos, que si mi forma de pensar, que si la responsabilidad, que si soy tonta, que si soy muy lista, que si me falta esto o lo otro...
Siempre me falta más, siempre me exigen más.
Diana mira esto, Diana mira lo otro, Diana esto esta mal, Diana mirate, Diana ten vergüenza, Diana me desepcionaste, Diana te falta más, Diana haz esto, Diana no sigas por ese camino, Diana hazlo bien, Diana mira a tu hermano, Diana no me esperaba eso de ti, Diana nunca saber nada...
Pienso en un presente que está marcado por un pasado doloroso en el que una niña descubre las verdades de la vida. Ahora me doy cuenta de que mi única enemiga, causante de todos mis problemas, es esta mente rota desde niña. Por culpa de esos agujeros negros no me enfrento a mis miedos, que sin remedio dañan a mi pequeña autoestima y eso causa mi debilidad, la cual me hace centro de miradas maliciosas. Intento pensar que el presente es un regalo y que cada cosa que escribo es un delito, retando a que gente ilusa me intente cuestionar las verdades que yo misma he vivido. Me niego a escuchar comentarios que me presten ayuda ajena, estoy bien y no gracias a nadie de este mundo. Agradezco la ayuda de Dios, que no me abandona; la de mis padres y la de mi misma. Por lo demás, no quiero que gente me preste ayuda falsa ni aunque verdadera sea: Gracias pero no me sirve de nada que sientan pena de mi, para eso ya estoy yo cada vez que me miro al espejo.